Es sabido que para el ser humano no hay mayor preocupación que sentir que estamos en peligro y lo primero que hacemos es poner a salvo nuestras vidas y la de los nuestros, en cualquier ámbito que sea. Si sentimos que por alguna razón estaremos amenazados automáticamente nos volvemos precavidos, cautelosos y nos protegemos.

Sin embargo, el miedo en una gran escala nos puede llevar a cometer errores, desatinos y hasta problemas mayores que atentan en contra de nuestra salud mental, física y emocional.

Sin importar en qué momento nos encontremos, debemos tratar de mantener la calma y respirar, sobre todo para transmitirla a las personas que tenemos a nuestro alrededor, familiares, amigos, compañeros de trabajo, a todos.

El miedo nos paraliza, no nos deja ver las cosas claras, haciéndonos equivocar mas veces de las esperadas.

Recuerdo una vez en mi adolescencia, fuimos a una piscina en una casa club una prima, mi hermana y yo, donde mi prima que si sabía nadar se lanza al agua sin precaución y sale airosa rápidamente sin percatarnos mi hermana y yo (que no sabíamos nadar) la profundidad de la misma. Sin pensarlo nos lanzamos al agua y para sorpresa nuestra, era más profundo de lo esperábamos. En eso, mi hermana que, si estaba más cerca de la orilla, se agarra y se pone a salvo, pero yo que me lance más lejos no pude.

Esos segundos fueron terribles para mí, pensé que me ahogaba, mi miedo fue tal que solo pensaba en que me iba a ahogar, grité, manoteé, solo veía a mi hermana extendiendo la mano hacia mí, seguí gritando, luego ella me alcanzo y me puso a salvo.

En esos breves segundos y pensándolo ahora claramente, nunca pensé en tratar de alcanzar la orilla, solo me movía en el mismo lugar diciendo ayuda, en vez de tratar de avanzar un poco hacia la orilla que estaba solo a centímetros de mí. En vez de nadar por debajo hasta tocar la esquina, solo pensaba, me voy ahogar…

Asi mismo, en nuestras vidas nos vemos en situaciones que nos paralizan, que no nos permiten pensar claro, nos hacen cometer errores, a no escuchar a esa persona que nos dice “ten cuidado”, hazlo de esta manera.

Si por alguna razón estás viviendo situaciones de miedo que no te dejan pensar ni escuchar a los demás, te invito a que te concentres, te calmes y tomes una breve pausa para que puedas actuar de la mejor manera para ti y para los tuyos. Recuerda que todo pasa, problemas financieros, de salud, problemas en relaciones sentimentales, de trabajo, todo, absolutamente todo pasa…

Tratemos que los miedos no sean pandemias en nuestras vidas, ni en la de nuestros seres queridos, que como indica la palabra “es una enfermedad que se transmite a todo el mundo”

Por: Raysa Castillo (República Dominicana)

MORE (Mindfulness, Oportunidades, Resiliencia y Equidad). Es un proyecto no lucrativo que involucra a hombres y mujeres comprometidos con la capacitación y desarrollo de la mujer. Te invitamos a que nos sigas a través de nuestro grupo de facebook: https://www.facebook.com/groups/2381345738608995/