En los últimos años se han puesto de moda en occidente actividades como la meditación y el yoga. Su publicidad ha sido enfocada en ampliar el sentido estético hasta los beneficios en la salud física. Atribuyéndole connotaciones espirituales, adornándolo de rituales complejos y variados.

Tapetes, inciensos, trajes, música, campanas, cuencos y afiches de deidades adornando la simple y no tan glamorosa idea del estar presente. Este presente en el que irremediablemente siempre estamos. Detrás de todas las formas que han servido para traer a la meditación al mainstream,  está su idea central: Aliviarnos del sufrimiento y del apego de las construcciones mentales para simplemente estar y aceptar el presente.

Los budistas dicen: “Antes de la iluminación cargar agua y cortar leña. Después de la iluminación cargar agua y cortar leña”, es decir, el estar centrados y presentes nos hará tener una visión más clara y más serena sobre las circunstancias que vivimos en el día a día. Es un aprender a disfrutar los momentos “simples” con nuevos ojos, libres de prejuicios o expectativas construidas.

Mindfulness meditation o atención plena es la acción de reconocer y aceptar todo lo que sucede en el momento presente sin juicios de valor, más bien con curiosidad y apertura. Popularizada por el Dr. Jon Kabat Zinn quien ha expandido su práctica y promovido la investigación basada en evidencias sobre lo que sucede dentro de nosotros cuando meditamos.

Meditación o atención plena no es sentarse en silencio y tratar de “no pensar” o “poner la mente en blanco”, este ha sido uno de los errores al popularizar la idea de meditar. Parte de las técnicas o ejercicios involucran de entrada un estado donde uno aprende a estar con el cuerpo, curioso de lo que sucede, sin intentar cambiar nada, siendo un espectador de lo que va fluyendo.

Además, el meditar se debe transportar al día a día. Al estar presente en lo que hagamos diariamente. El salirnos de los diálogos internos e interactuar con el mundo más allá de las creencias preconcebidas y los  prejuicios. La atención y aceptación plena se debe experimentar en la vida diaria.

La idea es aprender a tomar cualquier experiencia tan simple y ordinaria, como tomar una taza de té, y al brindarle nuestra atención podemos experimentarle como algo extraordinario y si esto lo expandimos a las diversas actividades que realizamos podemos probablemente sentirnos más vivos y en armonía con lo que nos rodea.

El doctor Mihaly Csikszentmihaly en su libro “Flow”, habla de ese estado ideal donde fluimos, donde estamos absortos en alguna actividad que disfrutamos y el tiempo sentimos que vuela, donde la idea del YO, el ego, desaparece para estar simplemente siendo en el momento presente.

No necesitamos ir a un estudio a meditar sino incorporar la meditación en nuestras actividades diarias.

Meditar sirve para salirnos de nuestra cabeza, de las historias que nos hacemos y nos contamos. Meditar es estar aquí centrados en el ahora, este momento, el cual realmente tenemos.

Alethia Olmedo-Perlasca MA. CCH. se ha capacitado  durante varios años en diversos áreas psicológicas, centradose principalmente en: la resiliencia, el optimismo, la ansiedad y el manejo del estrés, utilizando principalmente técnicas de hipnosis clínica.

Por: Alethia Olmedo (Méxicana, residente en Las Vegas, NV) Facebook:https://m.facebook.com/alethiaolmedop/

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