¿Sabías que La palabra víctima viene del latín, que hace referencia al ser vivo persona o animal destinado al sacrificio, y si bien este término es muy fuerte, es la realidad, solo que muchas veces quieres salir ganadora siendo una víctima del drama.?
Te victimizas por las ganancias secundarias que obtienes al tener este comportamiento, pregúntate:
¿Qué ganancias secundarias estoy obteniendo cada vez que me martirizo, cada vez que soy la pobrecita?
Te sorprenderás del gran número de ganancias que estas obteniendo y que no estas dispuesta a perder, simple y sencillamente porque te sientes bien en tu zona de confort, y salir de ella implica generar cambios, pero sobre todo comenzar a vivir tu vida siendo la protagonista, y dejando atrás el que otros decidan por ti.
¿Por qué te gusta hacerte la víctima?
• Recibes atención, cobijo del grupo familiar
• Ganancias secundarias
• No te responsabilizas de tu infelicidad
• Buscas que por piedad, empatía o lástima no te dejen sola
• Sientes que así juzgan al agresor y no a ti
• Intentas que te reparen el daño ocasionado
Si te das has dado cuenta actúas así porque tener la atención de las demás personas te resulta muy cómodo, además de que no quieres hacerte responsable de tus decisiones y es más sencillo ir por la vida depositando culpas en las demás personas.
Hoy por hoy la queja se ha convertido en el deporte nacional de las mujeres que se viven como víctimas de su propia situación.
Por esto es importante que tomes conciencia de como actúas cada día y que sepas que El antídoto a la victimización es la actitud ante lo que te pasa y responsabilizarte de la búsqueda de tu felicidad.
Ya no dejes en manos de otros tu propia felicidad eso es algo única y exclusivamente que a ti te corresponde, a nadie más.
Imagina tu vida siendo la protagonista de ella, donde ahora eres capaz de tomar decisiones, acertadas o equivocadas pero tuyas, saber decir NO sin sentir culpas, siendo responsable de tus actos, y luchando por lo que consideras que es mejor para ti.
¿Sería lo ideal? No lo crees así.
Hoy comienza a poner atención a tu manera de actuar y cada vez que te descubras siendo víctima de nuevo, recuerda que corres el riesgo de quedarte sola, porque a quien le gusta estar compartiendo su tiempo con una mujer que se queja todo el tiempo.
La respuesta: A nadie.
Así que hoy es un buen día para cambiar, dejar de ser la pobrecita para salir al mundo como una mujer con poder.
¿Quieres saber si te estas comportando como una víctima?
Aquí te dejo el siguiente Test:
Responde sí o no a estas preguntas:
1.-¿Tienes frecuentemente la sensación que te han timado o visto la cara?
2.-¿Utilizas frases como: Tú me haces enojar, te pego porque no entiendes, él me desespera etc.?
3.-¿Te parece que el mundo no es justo contigo?
4.-¿Piensas que se te ha privado de oportunidades que otros tienen?
5.-¿Por lo menos te quejas dos o tres veces al día?
Si respondiste que sí a la mayoría, definitivamente te estás victimizando, es decir, estás en el extremo opuesto a la responsabilización.
Un abrazo.
Marisol Enriquez. Escritora/ Coach de autoestima y amor propio @coachmarisolenriquez
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